Transforma tu estilo de vida y tu cuerpo sin dietas

bajar de peso sin hacer dietas

Si te detienes a pensarlo casi siempre las soluciones rápidas y dietas relámpago no duran mucho tiempo y más tarde o más temprano volvemos a las mismas » malas «costumbres. Eso es porque en el fondo somos controlados por los hábitos,  y es por ello que si queremos ver cambios positivos y duraderos en nuestras vidas debemos empezar por trabajar nuestros hábitos uno a uno. Lograr bajar de peso sin hacer dietas y tener una vida más sana, plena y feliz no tiene que ser difícil y complicado, sólo tenemos que ir moldeando día a día cada hábito.

Aquí traemos algunos hábitos que pueden ayudarte a transformar tu vida y tu cuerpo sin dietas, sólo cambiando estos hábitos y costumbres. Algunos de estos propósitos se pueden lograr de forma fácil otros serán todo un reto y algunos de seguro los hacemos de forma inconsciente.

Transforma tu estilo de vida y tu cuerpo sin dietas:

–  Bebe más agua: Nuestro cuerpo necesita agua para funcionar correctamente. El agua es necesaria para la mayoría de nuestras funciones corporales  y por lo general es que el adulto promedio debe beber al menos dos litro de agua al día. Escucha a tu cuerpo trata de beber el agua necesaria.

– Piensa antes de beber cualquier cosa: Esto puede resultar difícil ya que la mayoría de las veces lo hacemos sin pensar. Pero hay que cambiar y la próxima vez que vayamos a tomar cualquier bebida pregúntate:  ¿Es buena esta bebida para mí? Las bebidas azucaradas y sobre todo los refrescos son altos en calorías y azúcares y el consumo habitual puede conducir al aumento de peso, obesidad y hasta caries. Trate de beber agua o té verde en lugar de beber cualquier clase de estas bebidas.

– Sé consciente de lo que comes: Muchos comemos a la carrera, en el coche, mientras vemos la tele y prestamos poca atención a lo que consumimos. A partir de ahora, trata de ser consciente de lo que estás comiendo. ¿Realmente este alimento le dará a mi cuerpo los nutrientes que necesita? Empieza a comer sólo cuando tienes hambre, deja de comer en cuanto te sientas lleno/a y reduce la velocidad en la que comes. La digestión comienza en la boca, así que cuanto más mastiques (hay que masticar los bocados unas 20 veces) tendrás una digestión mejor y te sentirás diferente.

comer sano recetas
Comer de forma sana y saludable

– Duerme lo suficiente: Todos sabemos lo importante que es dormir lo suficiente y lo mal que nos sentimos cuando no lo hacemos. Investigaciones sugieren que la cantidad ideal de sueño puede ser de entre siete horas, aunque algunas personas pueden necesitar más. Aquí también se trata de escuchar a tu cuerpo y toma nota de la cantidad de horas de sueño que te hacen sentir bien y con energía. Cuando consigas esa cantidad ideal, aférrate a ella.

– No compres comida chatarra: Es muy difícil resistirse a la tentación de comer tu comida chatarra favorita cuando la tienes enfrente. Aunque la cantidad lo es todo evita la tentación y deja de comprar este tipo de alimentos y no vayas a lugares donde la venden. Deshazte de todo lo que es dulce, grasoso, salado, etc. Limpia tu nevera y despensa de todos estos alimentos e incluso evita pasar por los pasillos del súper mercado donde se ofrecen estos productos.

– Reduce el consumo de azúcar:  Ya hemos recortado las bebidas azucaradas, pero ahora es el momento del gran reto. Hay que intentarlo e ir disminuyendo la cantidad de azúcar que se consume cada día, hacerlo poco a poco, día tras día, hasta lograrlo. Hay muchísimos estudios, investigaciones y opiniones por todos lados acerca del por qué el exceso de azúcar es malo para su salud. Incluso se habla de que esta es una de las adicciones más fuerte de nuestro siglo. Así que debemos reducir su consumo.

– Añade más frutas y verduras a tu dieta: Intenta hacer una lista de las diferentes frutas y verduras que te gusta comer e introdúcelas en tu dieta y tus comidas diarias. Compra siempre estos productos de temporada y disfruta de los beneficios que vas a tener una vez que los incorpores a tu dieta diaria.

– Realiza una actividad física o ejercicio cada vez que puedas o en cualquier lugar: Siempre usa las escaleras. Utiliza el descanso del almuerzo para ir a dar un paseo al aire libre. Aparcar el coche un poco más lejos del trabajo y disfruta del paseo. Antes de sentarte en el sofá por la noche realiza 20 saltos, 20 flexiones de brazos, 20 abdominales y 20 sentadillas. Baila mientras cocinas, trabajas o haces cualquier otra actividad. Esto puede parecer extraño pero lo importante es dejar la inactividad y estar en movimiento constantemente.